El porcentaje medio de grasa corporal de los adultos estadounidenses es superior al rango saludable recomendado.Image Credit:PeopleImages/E+/GettyImages
Es posible que sepa que calcular su porcentaje de grasa corporal puede darle una idea de su salud general y del riesgo de padecer ciertas enfermedades. Pero antes de hacer los cálculos, es posible que desee saber cómo es un rango saludable y cómo se compara con el porcentaje medio de grasa corporal.
Aquí veremos qué se considera ideal en lo que respecta a la grasa corporal y cómo se comparan las medias nacionales de hombres y mujeres.
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¿Qué es un porcentaje de grasa corporal saludable?
Un porcentaje de grasa corporal saludable es en cierto modo un objetivo en movimiento. Los expertos no suelen ponerse de acuerdo sobre un porcentaje de grasa corporal «ideal», ni siquiera sobre un rango «óptimo». Esto se debe a que entran en juego varios factores para cada individuo.
Por un lado, las mujeres necesitan un mayor porcentaje de grasa corporal que los hombres debido al tejido mamario y a las necesidades de sus sistemas reproductivos. Además, las personas mayores, especialmente las mujeres posmenopáusicas, suelen tener porcentajes de grasa corporal más elevados que las personas más jóvenes del mismo sexo (y, de hecho, lo necesitan, ya que cuanto más envejecemos, más probabilidades tenemos de tener que soportar una enfermedad o una larga hospitalización). Y los atletas profesionales -y, en menor medida, las personas simplemente en forma y muy activas- tendrán más músculo magro y menos grasa que otras personas de la misma edad y sexo.
Dicho todo esto, sin embargo, la Asociación de Medicina de la Obesidad proporciona rangos considerados «aceptables
- Mujeres: 25 a 31 por ciento
- Hombres: 18 a 24 por ciento
Bien, ¿cuál es el porcentaje medio de grasa corporal?
Alrededor del 30 por ciento de los adultos tiene sobrepeso, mientras que el 42 por ciento padece obesidad, según las estadísticas del Departamento de Salud y Servicios Humanos de EE. UU. Pero tener sobrepeso no significa necesariamente tener una cantidad de grasa poco saludable. De hecho, una persona puede ser relativamente delgada y aun así tener demasiada grasa corporal.
Pero en lo que respecta a la media nacional de porcentaje de grasa corporal, tanto hombres como mujeres superan el máximo recomendado, según el Centro Nacional de Estadísticas Sanitarias de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades de EE.UU:
- Mujeres: 41 por ciento
- Hombres: 28 por ciento
Cómo calcular su porcentaje de grasa corporal
Existen diferentes métodos que pueden ayudarle a determinar su porcentaje de grasa corporal, algunos más fiables que otros.
«Un escáner DEXA es la forma más precisa de medir la grasa corporal», afirma el Dr. Meyer. «Esta tecnología utiliza la absorciometría de rayos X de energía dual y tiene una precisión del 98%». Además de revelar su composición corporal, estos escáneres miden la densidad ósea y pueden revelar su riesgo de osteoporosis, según la Clínica Cleveland.
En el mejor de los casos, resulta difícil calcular uno mismo el porcentaje de grasa corporal con exactitud. Aunque existen varias fórmulas, requieren un alto nivel de cálculos que deja mucho margen al error.
Sin embargo, hay una forma más sencilla: puede estimar su porcentaje de grasa corporal introduciendo algunas de sus medidas clave en la calculadora de grasa corporal de morefit.eu. Las mujeres necesitarán sus medidas de cintura, cadera y cuello, mientras que los hombres deberán tener a mano sus medidas de abdomen y cuello.
Porcentaje de grasa corporal frente al IMC
Su porcentaje de grasa corporal no debe confundirse con su índice de masa corporal, o IMC.
En primer lugar, la fórmula de esta medida es mucho más sencilla: su peso en kilogramos dividido por su altura en metros, al cuadrado.
Aunque el IMC no es una medida directa de la grasa corporal, a menudo se hace referencia a él por su sencillez.
Según los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades, un IMC normal se sitúa entre 18,5 y 24,9, y este rango se aplica tanto a hombres como a mujeres. Por debajo de ese valor se considera bajo peso, y por encima, sobrepeso. Un IMC de 30 o más califica como vivir con obesidad.
El gran inconveniente del IMC es que no distingue entre grasa y músculo magro. Por esta razón, las personas musculosas tienen a veces un IMC más alto que los individuos poco musculosos, que pesan menos pero tienen más grasa corporal.
«Hay quienes tienen un IMC bajo y, sin embargo, un porcentaje de grasa corporal elevado», señala el Dr. Meyer. «Esto podría plantear riesgos [para la salud] a largo plazo, al igual que lo haría un IMC elevado».