Si no come mucha fibra, puede que le cueste digerir la fibra de la lechuga.Image Credit:fcafotodigital/iStock/GettyImages
Fuente baja en calorías de fibra y otros nutrientes, la lechuga es parte integrante de las ensaladas y de muchos otros platos. Sin embargo, ver lechuga sin digerir en sus heces puede hacerle desconfiar un poco de esta hoja verde. Esto es lo que debe saber sobre las verduras no digeridas en sus heces.
Consejo
Aparte de evitar la lechuga o comer cantidades más pequeñas de ella, puede intentar masticar cada bocado más a fondo para ayudar a su cuerpo a digerirla. También debe acudir al médico si tiene otros síntomas como diarrea o pérdida de peso.
Verduras sin digerir en las heces
La presencia de verduras no digeridas en las heces no es infrecuente. La Universidad de California en San Diego (UCSD) afirma que mientras que el 75 por ciento de sus heces es agua, el otro 25 por ciento está formado por alimentos no digeridos, bacterias y fluidos digestivos. De hecho, la UCSD señala que tampoco es raro que sus heces sean verdes después de comer verduras de hoja verde.
Probablemente se pregunte por qué parte de los alimentos que ingiere no se digieren. Un estudio de junio de 2012 publicado en el Journal of Food Science and Technology explica que sus enzimas digestivas no pueden digerir ni absorber la fibra alimentaria, por lo que ésta pasa relativamente intacta por su sistema digestivo.
La UCSD señala que, debido a la incapacidad para descomponer la fibra, algunas personas no pueden digerir las verduras de hoja verde, que suelen ser fuentes ricas en fibra. El resultado son problemas gastrointestinales que pueden ser dolorosos e incluso embarazosos en ocasiones. Según la UCSD, que usted pueda o no digerir las verduras de hoja verde depende del tipo de verdura y de su microbioma, o bacterias intestinales.
Entonces, ¿es normal que vea lechuga sin digerir en sus heces? Según la Clínica Mayo, ver un fragmento ocasional de comida sin digerir no es un problema, a menos que vaya acompañado de diarrea persistente, otras alteraciones en sus hábitos de ir al baño o pérdida de peso, en cuyo caso debe consultar a su médico.
Cómo remediar la lechuga no digerida en las heces
Si sólo tiene problemas con la lechuga, puede intentar evitarla y optar por otras verduras en su lugar. Sin embargo, si se da cuenta de que no puede digerir las verduras de hoja verde en general, entonces es posible que tenga que buscar otras soluciones; por ejemplo, la UCSD sugiere tomar medicamentos sin receta para aliviar los gases que pueda sufrir al comer estas verduras.
Según la Clínica Mayo, también puede enfrentarse a este problema si ha aumentado repentinamente su ingesta de fibra, en cuyo caso podría ayudarle reducirla y aumentarla gradualmente a lo largo de unas semanas. Esto dará a las bacterias de su intestino algo de tiempo para adaptarse al aumento de fibra y así poder digerirla mejor.
Si come lechuga, puede intentar comer cantidades más pequeñas de lo habitual y masticar bien cada bocado, para que le resulte más fácil de digerir y los fragmentos que pueda haber en las heces sean más pequeños.
Si el problema persiste y le resulta incómodo, debería visitar a su médico. La Universidad de Columbia explica que ciertas afecciones como la intolerancia a la leche o a la soja podrían causar malabsorción, en la que su cuerpo es incapaz de absorber la nutrición de los alimentos, en cuyo caso es posible que tenga que buscar tratamiento.
La Universidad de Columbia señala que algunas cirugías, medicamentos y otras condiciones de salud como las infecciones parasitarias, ciertos tipos de cáncer, el VIH/SIDA, la enfermedad celíaca y la enfermedad de Crohn también podrían causar malabsorción.
La gastroparesia es otro trastorno digestivo que podría afectar a la capacidad de su organismo para digerir la lechuga y que requiere atención médica. Un pequeño estudio publicado en la revista Digestive Diseases and Sciences en abril de 2015 descubrió que la lechuga es uno de los alimentos que podrían agravar este trastorno.